El canciller alemán, Olaf Scholz, hizo hoy un llamamiento a ampliar las conversaciones internacionales para allanar el camino hacia el fin de la guerra en Ucrania, a la vez que eludió comprometerse a entregar misiles de crucero a Kiev.
Scholz calificó las conversaciones de seguridad sobre Ucrania celebradas la semana pasada en Arabia Saudí como “muy importantes”, agregando que “desgraciadamente, solo han sido el principio”, en una entrevista con la cadena de televisión pública alemana ZDF.
El canciller destacó como especialmente importante la participación de China en las conversaciones lideradas por Arabia Saudí. China, quizá el socio internacional más importante de Rusia, se ausentó de una cumbre internacional anterior celebrada en Copenhague en junio.
“Por eso tiene sentido continuar estas conversaciones, porque aumentan específicamente la presión sobre Rusia para que se dé cuenta de que ha tomado un camino equivocado y tiene que retirar las tropas, para facilitar la paz”, dijo Scholz.
Rusia no fue invitada a asistir a la reunión. Entre los participantes hubo asesores de seguridad nacional y representantes de más de 40 países, entre ellos Ucrania, Estados Unidos, Alemania, China, India, Brasil y Sudáfrica, así como de organizaciones internacionales, incluidas las Naciones Unidas.
En la misma entrevista, Scholz expresó sus reservas sobre la posible transferencia de misiles de crucero Taurus a Ucrania, solicitada por ese país.
Scholz dijo que, como en el pasado, el Gobierno alemán siempre revisará cada decisión individual con mucho cuidado, es decir qué es posible, qué tiene sentido, cuál puede ser la contribución alemana.
El ministro ucraniano de Relaciones Exteriores, Dmytro Kuleba, había reiterado en declaraciones al dominical alemán “Bild am Sonntag” el pedido de Kiev para que Alemania suministre misiles de crucero Taurus a su país para defenderse de la agresión rusa.
Ucrania necesita los misiles “para salvar más vidas de soldados y civiles ucranianos y acelerar la liberación de sus territorios”, declaró Kuleba.
“La fórmula es sencilla: un mayor alcance de los misiles significa una menor duración de la guerra”, dijo Kuleba. Con esta arma, Ucrania podría “alcanzar a las fuerzas de ocupación rusas en suelo ucraniano mucho más allá de la línea del frente, perturbar su logística y destruir centros de mando y depósitos de municiones”, agregó el ministro ucraniano.
En Alemania existe también una creciente presión sobre Scholz para que refuerce el equipamiento militar ucraniano. Políticos de los partidos gobernantes y de la oposición exigieron que se dote a las Fuerzas Armadas ucranianas del sistema de armamento adecuado para destruir búnkeres y puestos de mando protegidos a una distancia de hasta 500 kilómetros.
Sin embargo, también existe un debate sobre si Ucrania podría tener también la intención de utilizar los misiles para posibles ataques contra territorio ruso y sobre el modo de evitarlo.
Scholz señaló que su impresión es que la gran mayoría de los ciudadanos está muy a favor de la entrega de misiles. “Las decisiones siempre deben sopesarse cuidadosamente”, dijo sin embargo el canciller. “Y seguiré haciéndolo y diciéndolo muy claramente”.
El jefe del Gobierno germano recalcó que Alemania es el país que más apoya a Ucrania después de Estados Unidos. “Lo hacemos principalmente con tanques, con artillería. Lo hicimos con mucha defensa aérea”.
Ucrania ya dispone por otra parte de misiles de crucero de Reino Unido y Francia. El país lleva más de 17 meses defendiéndose de la guerra de agresión rusa.
Kuleba reiteró las garantías de que los misiles de crucero solo se desplegarán dentro de las fronteras de Ucrania. Las preocupaciones de que Ucrania pueda utilizar misiles Taurus contra objetivos en suelo ruso son “infundadas”, afirmó.
Por su parte, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, agradeció nuevamente a Alemania la reciente entrega de otros dos sistemas de defensa antiaérea Patriot.
“Esto es muy importante”, dijo Zelenski en su discurso vespertino de los sábados. “¡Gracias! Gracias, Alemania”, enfatizó y añadió, dirigiéndose al canciller Scholz: “¡Gracias, Olaf!”.
La entrega a Alemania de los nuevos sistemas Patriot se dio a conocer hace unos días. Los Patriot, construidos en Estados Unidos, son especialmente valiosos para Ucrania porque, según Kiev, ya han interceptado varias veces misiles hipersónicos rusos.