Robert Habeck, ministro alemán de Economía, durante la presentación de las nuevas previsiones para 2023 y 2024. Crédito Michael Kappeler/dpa
El Gobierno alemán confirmó hoy la rebaja de sus previsiones económicas al prever ahora que el producto interior bruto (PIB) se contraerá un 0,4 por ciento en 2023 y crecerá un 1,3 por ciento en 2024.
En su anterior previsión, difundida en la primavera europea, el propio Gobierno confiaba en que la economía alemana creciese un 0,4 por ciento este año y un 1,6 por ciento en el año que viene.
El ministro alemán de Economía, Robert Habeck, se refirió a “dificultades económicas” al presentar las cifras.
Al justificar el descenso previsto, citó las consecuencias de la crisis de los precios, el debilitamiento de importantes socios económicos mundiales y la lucha del Banco Central Europeo contra la inflación.
“También hay problemas geopolíticos que aumentan la incertidumbre. Por tanto, estamos saliendo de la crisis más lentamente de lo esperado”, explicó.
El político ecologista sostuvo que los problemas de crecimiento de la economía alemana deben resolverse de manera estructural, e hizo referencia a la excesiva burocracia y a la escasez de mano de obra y trabajadores cualificados.