Se trata de una persona de Tilisarao, cuyo diagnóstico fue confirmado tras un análisis que se realizó en un hospital de San Luis. El Ministerio de Salud no brinda mayores precisiones sobre el escenario.
El Ministerio de Salud confirmó en las últimas horas la detección de un caso autóctono de dengue en la provincia. De acuerdo a la información, el registro abarca la temporada 2024-2025, desde agosto hasta la fecha. Se trata de una persona de Tilisarao, cuyo diagnóstico fue confirmado tras un análisis realizado en un hospital de San Luis. La situación se da en medio de un cuestionado escenario, con escasez de datos oficiales y una notable impericia a la hora de medidas preventivas. Hay preocupación en todo el territorio puntano.
Según el informe proporcionado por las autoridades, a instancias de una publicación en la Agencia de Noticias San Luis, el paciente presenta síntomas compatibles con la enfermedad, pero su cuadro es ambulatorio y se encuentra en buen estado general.
La circunstancia se da en un presente vacilante. Al mismo tiempo que se confirmó el caso, se supo que hay dos pacientes bajo la sospecha de dengue (que se informaron este martes). Otras personas del barrio San Cayetano (de Tilisarao) requirieron atención en el hospital local por distintos síntomas. De igual manera, trascendió que una mujer de una localidad del Departamento Junín habría sido diagnosticada con la enfermedad tras un análisis clínico que se efectuó en Villa de Merlo, pero no se ha notificado de manera oficial.
Ante todos los trascendidos, hay un paupérrimo manejo en la información. Lejos de aclarar los tantos, solo se siembran dudas. No muestran datos, no hay propagandas ni campañas de prevención, tampoco abordan informes semanales respecto a las notificaciones “obligatorias” que tiene que hacer el Ministerio de Salud. En cualquier rincón de San Luis, es amplísima la cantidad de mosquitos que hay y nada se hace frente a ello.
Lo único que se difunde en la actualidad, es una campaña publicitaria de dudosa efectividad, en la que le piden a vecinas y vecinos de la ciudad que mencionen una suerte de trabalenguas que alude al descacharreo. “Es más fácil hacerlo, que decirlo”, apunta una voz en off, sin mayores precisiones. Luego recomienda: limpiá, descacharrá, cortá el césped. La propaganda, en vez de apuntar a la reflexión y a la acción, lleva a la cabeza del televidente a cualquier otro lado y el mensaje se pierde. Lo más elemental, como qué hacer ante la acumulación de agua en las macetas, en los escurridores de los cubiertos o en distintos elementos como las chatarras, se omite en gran medida.
Tampoco hay medidas concretas en las barriadas para concientizar, no existen las salidas de campo que insten al descacharreo, por ejemplo. Y si las hubiese, habría un claro error en la difusión: en los hechos, la evidencia indica un “abandono” por parte de las autoridades.
A no pocos referentes de la Salud les preocupa el contexto. Incluso surgen serias dudas sobre el abordaje de otros dramas como lo que pasa en el mundo con el sarampión. Las políticas públicas de la cartera sanitaria brillan por su ausencia.
Según se informó, frente a la reciente confirmación del caso autóctono “el equipo de Epidemiología realizó (este miércoles) el bloqueo de foco” y continuarán con estas disposiciones este jueves. También aseguraron que llevarán a cabo “fumigaciones programadas la próxima semana” con el objetivo de “reforzar” la prevención y evitar la propagación del virus.
Por lo pronto, todo indica que “es tarde”. La prevención no se hace a último momento, sino que se trata de una tarea transversal e integral, que se planifica con tiempo. Recursos para el proselitismo sobran, la inversión para lo primordial es inexistente.
Para cumplir
En la nota que dio a conocer el caso autóctono, precisaron “a vuelo de pájaro” distintos consejos para evitar el dengue. Subrayaron la eliminación de recipientes con agua estancada en patios y alrededores, la necesidad de mantener tapados los tanques de agua, limpieza de canaletas, el uso de repelente y ropa que cubra brazos y piernas y la colocación de mosquiteros en puertas y ventanas.
“El compromiso de toda la comunidad es clave para evitar la propagación del dengue. Ante la aparición de síntomas como fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares y articulares, sarpullido o malestar general, se recomienda no automedicarse y acudir al centro de salud más cercano”, describieron.
Por ahora, frente al dengue, hay más dudas que certezas en torno a la actuación del Ministerio de Salud. Habrá que ver cómo evoluciona el panorama y qué medidas disponen las autoridades.